(María de Cleofás del misterio del Regreso del Sepulcro, imagen tallada por don Juan Manuel Miñarro López y bendecida el 29 de marzo de 1998)
Santa María de Cleofás nació probablemente en Palestina, contemporánea de Jesús. Pudo haber sido su tía, ya que al parecer estaba emparentada con la Virgen y San José.
La María que se venera era esposa (o quizás hija) de un hombre llamado Cleofás. El evangelio de San Juan (19:25) la menciona como parte de los testigos de la Crucifixión. Pertenecía, por lo tanto, al círculo más íntimo de los discípulos de Jesús.
Según los demás evangelios, ella era la madre del apóstol Santiago el Menor (Marcos, 15:40), por lo que a veces se le menciona como María la de Santiago.
Santa María de Cleofás se encontraba entre las mujeres que acudieron a la tumba de Jesús para ungir su cuerpo, pero fue entonces cuando se les apareció un ángel anunciándoles que el cadáver ya no estaba allí. Fue así una de las primeras personas que testificó la Resurrección (Marcos, 16:1).
La festividad de Santa María de Cleofás se celebra el día 24 de abril.